Celebrar los éxitos trae beneficios para la salud
En el acelerado mundo de hoy, parece que tan pronto como las personas superan un obstáculo o logran un objetivo, pasan al siguiente. Pierden sus primeros cinco kilos e inmediatamente cambian su atención a los siguientes 15 que quieren perder. Limpian la cocina y se trasladan a la siguiente habitación. O obtienen un ascenso laboral solo para fijar sus ojos en el siguiente.
Al enfocarse en el futuro, las personas a menudo se olvidan de disfrutar el presente. Se estancan, sienten más estrés y experimentan más fatiga. Pierden el entusiasmo por sus objetivos. Además, se olvidan de disfrutar de la vida. Por eso es importante celebrar tus éxitos, tanto grandes como pequeños.
Mucha gente se obsesiona con el término “celebración”. Una celebración no significa necesariamente un gran evento o gesto. Una celebración puede ser tan simple como un reconocimiento que te das a ti mismo. Celebrar tu éxito se trata más de tomarse un tiempo para reflexionar sobre tu viaje.
Al darte la oportunidad de revisar tu progreso, las celebraciones hacen que te detengas en lo positivo, generando el tipo de gratitud que aumenta la felicidad y prolonga su vida. Varios estudios han encontrado que este enfoque de la vida trae beneficios significativos, incluida una mejor salud física y mejores estrategias de afrontamiento. Las personas que se toman el tiempo para reflexionar y celebrar sus éxitos son generalmente más optimistas, se cuidan mejor y tienden a estar menos estresadas. Las celebraciones aumentan la sensación de bienestar de las personas, independientemente de los factores socioeconómicos, la educación, la edad o el sexo.
Si crees que no tienes nada que celebrar, piensa un poco más. Hay mucho en la vida que celebrar: primicias, transiciones, aniversarios e incluso los más pequeños logros. Puedes celebrar el primer tomate de tu jardín de verano o el primer día de primavera. Puedes celebrar la transición de tus hijos a la escuela, el regreso de tu pareja de un viaje de negocios o las ocasiones en que te reafirmaste positivamente. Incluso puedes celebrar los momentos en los que tachas tareas de tu lista de tareas pendientes.
Las formas en que celebramos pueden ser igualmente variadas. Por supuesto, puedes celebrarlo con una cena especial. Pero también puedes enviarte flores, darte un baño caliente, regalarte 15 minutos más con un buen libro o llamar a un buen amigo que pueda compartir tu alegría. Algunas personas encuentran gratificante anotar estos momentos en un cuaderno especial. El acto de escribirlo hace que el logro sea más concreto, y luego el libro sirve como un estímulo más adelante cuando necesites aliento.
La única regla para celebrar es hacerlo de inmediato. Simplemente no proporcionará el mismo beneficio dentro de ocho semanas que a las 8 p.m. hoy. Tómate un tiempo hoy para contemplar lo que tienes que celebrar, luego ve a celebrarlo.
Con el tiempo, descubrirás que tu nuevo enfoque de celebración también te conducirá a una nueva forma de pensar, una forma que recarga tus baterías, aumenta tu moral y tu confianza y te llevara a tu próxima celebración.
Traducido por Marcelo Kim